El Ágora de Alhaurín

  • Diario Digital | sábado, 27 de abril de 2024
  • Actualizado 00:01

Reflexiones de servilleta. Este cuerpo

Campo de girasoles, verano, primavera. Pixabay
Campo de girasoles
Reflexiones de servilleta. Este cuerpo

Este cuerpo mío,
que tuyo fue y será,
del que hiciste jardín
en pleno y seco estío
sigue siendo tu hogar,
refugio, lugar, fortín.

Esta carne que transformas
en cuna, trono y consuelo,
descanso, mimos, asueto,
con sus imperfectas formas,
merece ante todo respeto,
no hacer del espejo un duelo.

A la morada de mi alma,
que llenaste de paciencia,
quiero otorgarle calma,
cerebro y mucho corazón,
no verano en penitencia…

Para el cuerpo que me lleva,
el mismo que a tí te trajo,
cuidado y aceptación, única ciencia.
Complejos y falsa perfección:
¡se pueden ir al carajo!