Rivera, se ha nominado como mediador entre la izquierda y la derecha –pero escorándose hacia la casi izquierda que es el Psoe- firma acuerdos para la investidura del señor Sánchez y cuando la tinta aún está fresca ya está el señor Sánchez interpretando el documento y ofreciéndoselo a las otras fuerzas de izquierda, pero más al gusto de ellos. A este paso Rivera va a dejar a Ciudadanos en Populacho, el estar tanto tiempo con estos políticos ha aprendido que donde dije digo, también puede decir Diego, Secundino o Kevin Costner.

Si Rivera piensa que va a poder gobernar con Sánchez, en el supuesto de que llegase a la presidencia, lo tiene en arameo o japonés. La jugada de Sánchez es impropia de el –es muy buena-. Si no queda investido en esta primavera adelantada de El Corte Inglés, debería saber que los votantes de Ciudadanos se los van a repartir entre Psoe y PP y él se va a quedar compuesto y sin mucho de sus votantes.

Cuando Sánchez hace cuatro días mal contados le decía a Rivera y a Ciudadanos en general, que eran las juventudes del PP, o que su programa era el que les hizo Aznar en FAES. Estos extraños amigos de cama política, Sánchez los utiliza cómo partido de progreso y regeneración. Progreso en sus matemáticas de sumas –que con ellos solo no llega- lo pagaran en la próxima campaña, o creen que no le recordaran, que ellos no apoyarían ningún partido y ahora se les hace el culo caldo por firmar una hipoteca.

Sánchez se ha apoderado de los 40 escaños de Ciudadanos y el ya habla de que tiene 130, por lo que Rivera se ha convertido en un simple comparsa al no poner sus escaños en su talega y le permite a Sánchez que diga que son más que los que tiene el PP. ¿Entonces qué pinta Ciudadanos? De momento se han convertido en el “correveidile” del Psoe. Lo que sí veremos en los próximos días o semanas, es que las encuestas le dirán a Rivera que están subiendo cómo la espuma y hasta es posible que sean bastante reales, pero ya sabemos lo que pasa con la espuma cuando pasa cierto tiempo.

Otra de las cosas que me sorprende de estos partidos es la capacidad de interpretar y de dar lecciones a los demás. No son capaces de arreglar sus problemas domésticos, pero sí que son capaces de decirle al PP cómo tiene que hacer las cosas y hasta que líder han de tener, Rivera no quiere a Rajoy, pues debería decir a quien quiere, para no poner a alguien que no le guste y volvamos otra vez con la burra a brincos. Sánchez quiere un gobierno transversal, progresista, de izquierda, sin corrupción, ni corruptos –muy loable- . El progresismo, la izquierda –le recuerdo a Sánchez, que para las otras izquierdas el Psoe no es de izquierdas- pero en esa “transversavilidad” no entra un partido de derechas, demócratas hasta las cachas, lecciones doy que para mí no quiero.

Rivera, ha mentido de forma grave cuando dijo “no apoyaré un gobierno de perdedores” tú fuiste un perdedor “no apoyaré ni a Sánchez ni a Rajoy” mentiroso y tiene unas cuantas más. Y encima va a quedar como un “cornudo político” ya que en sus pactos, si es que son capaces de llegar a algunos, se tendrá que tragar el cambio en la Constitución, la derogación de su reforma laboral, confraternizar con nacionalistas, con Podemos y Pablo Iglesias como su vicepresidente. ¿Qué réditos le trae a Ciudadanos en general y a Rivera en particular, esta postura?

No sé si Rajoy será el candidato del PP, pero creo que el PP es quien debe decidir quien ha de ser su candidato, en el caso que tengamos nuevas elecciones. Lo que yo sí que tengo claro es que Mariano Rajoy no va a permitir que le echen con la mácula de que lo han tumbado por la corrupción de su partido. Si tiene oportunidad irá a nuevas elecciones, con la esperanza de obtener un mejor resultado que el anterior y entonces sí que es posible que diga, verdes la han segado y me voy silbando un bolero.

Si hay nuevas elecciones, Rajoy tiene claro que va a recuperar parte de los votos que se fueron con Rivera y de paso recuperar unos cientos de miles del millón largo de votantes del PP, que no se movieron en las últimas elecciones, con sumar 130 o 135 diputados, ya se conformaría.

Como esto seguirá para días y semanas, de momento os dejo esta frase que a Rivera le gustará “No quito ni pongo rey, pero ayudo a mi señor” Bertrand du Guesclin, ya veremos si cambia de señor.