Hoy me preguntaba un amigo si es verdad que yo no nunca me quejo, le respondí que había pruebas irrefutables de que yo nunca me quejo, me parece una tontería el hacerlo, antes de quejarme prefiero solventar el motivo por el que me he de quejar y si no soy capaz de solventarlo pues tampoco me quejo, para qué.

Otro amigo de hace muchos años Loquio, Soli Loquio, creo que nunca os he hablado de él, tiene la costumbre de hablarme y hacer comentarios al margen de mis escritos o de mis conversaciones. Loquio es como ese diablillo que tenemos casi todos y que te hace comentarios, preguntas y hasta hay veces que él y yo mantenemos conversaciones profundas y críticas sobre la vida, la amistad, el amor, la política, futbol y sobre todo lo que sea palpable.

Ahora que seguimos en la continuación de la campaña electoral Loquio me decía ayer mientras me tomaba un café –claro, tú no te quejas pero yo si– tú no estás autorizado a quejarte, le dije –porque tu lo digas– Loquio, yo tengo que cuidar las formas, tengo mi estilo y no soy de hacer mucha “sangre” de las cosas –tu y yo nos conocemos desde hace mucho y sé que en tu fuero interno cuando dices que no te quejas, es que desprecias sobre manera lo que consideras injusto, personas y situaciones– Pero eso es normal que en base a mis valores, lo que yo considero injusto los desprecie –ya ¿y las listas de los partidos?-  ¿quieres que hablemos de política y de las listas?

Loquio, este espacio es para emitir mis opiniones sobre la actualidad y nuestras conversaciones no son para exponerlas en público – claro lo que tu digas– Como dice el título de este yo no me quejo ¿las listas son realmente listas? –pues no son listas, ni listos los que ponen un nombre debajo de otro y a eso lo llaman listas ¿no querrás que te lo demuestre?–

Ya se han presentado las listas de varios de los partidos que se presentan en mayo con los nombres que la componen –y tu dale con las listas, que no son listas– . Como era de esperar y como nunca llueve a gusto de todos, estas listas han dado para tertulias, quinielas y el manido comentario de si ya lo decía yo, -¿pero a ti te gustan?- en mi quiniela personal mi porcentaje de acierto ha sido muy, pero que muy elevado –¿lo dices porque has acertado las del PP?– Loquio, sabes que el número cuatro ni en mis sueños más místicos lo habría acertado, disculpad las interrupciones de Loquio. Como iba diciendo, las listas en algunos casos hasta el número cinco, eran las presumibles, en otras hasta el siete o el ocho, hay una que no había que especular se sabía quién es el primero y otra que también –no te enrolles ¿y las ausencias?–

Es normal que se produzcan cambios tras los cuatro años que han pasado de legislatura, yo no me voy a quejar de esos cambios ¿pero y los cambiados? –van a dar salto de alegría si te parece, pues cabreados y algunos muy cabreados-. Lo normal es que lo tuvieran asumido –¿los del PP también?– para ellos ha sido una experiencia importante, cuatro, ocho o más años gestionando. Como es el caso de algunos de los concejales.

Algunas de las ausencias en los partidos para la siguiente legislatura me sorprenden –cuenta, cuenta– otras no tanto, ya eran casi vox populi los que no continuarían, algunos también se sabía que retrocederían en las listas de sus partidos. También se creó una incertidumbre durante unos días o semanas en como quedarían las listas de IU, con la posible integración de miembros de Podemos, que daría al traste con las primarias que hicieron, yo no me iba a quejar, pero no ha sucedido ese supuesto –y tú que te alegras– y quizás el más sorprendente, aunque lo intuía, es la no inclusión en las listas del PP de Carmen Doblas, responsable de los SS.OO –¡lo sabías!, si lo llevamos comentando hace semanas o meses–

Lo cierto es que la concejalía de Servicios Operativos es de las más complicadas de un Ayuntamiento. En este caso los comentarios que me habían llegado de la gestión de los responsables eran sorprendentemente elogiosas, desde ciudadanos de a pie, hasta los más significativos, los de integrantes de partidos de la oposición. Yo mismo comprobé la agilidad de los servicios operativos, informando de desperfectos en la avenida y a las veinticuatro horas estaban subsanados –eres un poco borde ¿querías saber si eran eficaces como decían?–

Hay vida después de la política, Carmen continuará su vida profesional en la empresa privada,-me alegro y yo se que tu también– ha sabido gestionar su futuro, mi deseo es que todos los que a partir del veinticinco de mayo dejen de ejercer como políticos encarrilen su vida profesional sin el menor problema.

-“Doc”, ¿me dejarás que comparta contigo tus yo no me quejo? Te prometo que yo solo haré “comentarios al margen”- ya veremos.