El Ágora de Alhaurín

  • Diario Digital | jueves, 02 de mayo de 2024
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20-D La campaña en televisión

“La política es el arte de servirse de los hombres haciéndoles creer que se les sirve a ellos”. Louis Dumur

20-D La campaña en televisión

Estamos a cuarenta y ocho horas de que podamos ejercer nuestro derecho al voto para elegir quien queremos que nos gobierne los próximos cuatro años. Pero a quien votamos ¿A una cara bonita? ¿A un prospecto? ¿A un partido? ¿A un programa? Pues visto lo visto en estas dos semanas en las televisiones, podríamos votar a una cadena de televisión. ¿Qué cadena ha hecho la mejor campaña?

Los debates, por llamarlos de alguna forma, han sido entre insulsos y repugnantes, el de los cuatro -tres candidatos, una vicepresidenta y dos periodistas- insulso hasta decir no puedo más. En ese “debate” algo quedó claro, se busca la telegenia en los líderes, todos mantienen una pose que les asegure un puñado de votos, no por el programa con el que supuestamente nos gobernarían si ganan, ya se sabe, el programa está para no cumplirlo.

¿Y porque digo que el programa está para no cumplirlo? Si alguien tiene el valor de leerlos, se dará cuenta a la que cuente con los dedos de una mano, que las cuentas en el apartado económico no les salen y en los apartados sociales tienen más brindis de los que hace un torero en una corrida. Después de ver esos “desdebates” me he dedicado hacer unos de los ejercicios que más me agrada, escuchar los comentarios de las personas que me rodean. Ya no hablan en su mayoría de los partidos políticos, hablan y personalizan en las bondades o maldades de los primeros espadas que los representan.

Los partidos si fuesen hábiles contratarían actores que diesen un perfil determinado, que estén rozando la cuarentena, con un aspecto limpio, que se supiesen el guion que el jefe de campaña les dé y ya tenemos un candidato que nos haga ganar las elecciones, por cierto, este candidato ha de ser bonito de ver. Si nos fijamos en los principales candidatos los partidos se han preocupado más de su imagen, que de sus postulados.

Y en esa materia los dos partidos emergentes les dan sopas con ondas a los del bipartidismo. En el debate a cuatro y dos periodistas ¿quién ganó? Para mi Vicente Vallés -periodista-, fue el más rápido y ágil mentalmente, ¿Sanchez? Un imitador maleducado de Iglesias ¿Iglesias? Un imitador malo de un socialdemócrata con un bolígrafo “bic” en la mano al que agarrarse ¿Rivera? Un imitador malo de Albert Rivera ¿Soraya? La vicepresidenta. Y perdedora de ese debate Ana Pastor, que no pudo lucir sus soflamas.

Repaso el “debate decisivo” como lo promocionaron el grupo Mediaset, ¿decisivo? Para mí se quedó en repugnante. ¿En ese debate algún simpatizante del PSOE sabe que propuso el candidato Sanchez? Lo que, si mostró en una grosería impropia del líder de la oposición de un país como España, para una república bananera daba el perfil, faltón, gritón, maleducado, grosero y lo peor, vendedor de humo protegido en dos cartulinas con estadísticas que las sacaba a destiempo. ¿Y el presidente? Se lo notó la falta de practica en debates cara a cara, en los que prima es la rapidez de respuesta y reacción a la acción del contrario, Rajoy es muy bueno en los debates en el púlpito del Congreso, allí tiene unos minutos para reflexionar y asesores a su lado, posiblemente es el mejor político en esas lides en el Congreso, pero en el cara a cara en un plató…

Pero un cara a cara en un plató de televisión es otra cosa y se le notó sobre manera su falta de preparación, al menos se escudó en lo que se tenía que escudar, en intentar explicar cuál es el programa que quiere llevar en los próximos cuatro años, no se le entendió ya que la parte contraria ni le interesaba ni le preocupaba. Me sorprendió su falta de agilidad a las acusaciones con y sin razón a las que se limitó hacer el candidato socialista. Corrupción, Sanchez -PSOE- acusando de corrupción a otro partido político y en particular al presidente del PP, era como escuchar a Maduro dando lecciones de democracia. Rajoy solo saltó cuando el candidato Sanchez se metió con el, mientras lo hizo con el partido miraba hacia otro lado, pero cuando lo señaló a él, le devolvió lo suyo y lo otro.

Y a todo esto con el “desmoderador” de hormigón, haciendo el don Tancredo, de vergüenza para él y para la profesión, permitió las malas formas del candidato y sus groserías. Los dos perdieron esa oportunidad de convencer a los votantes indecisos, uno por imitar a Iglesias y el otro por no darse cuenta de quien tenía enfrente. Y todos estos actores siguen con sus caravanas por la aún llamada España.

Y el culmen de esta campaña que se parece al programa de televisión “Salvame”, ha sido en Pontevedra, donde un “valiente” se atrevió a soltarle un puñetazo en la cara al hasta ahora presidente, por supuesto que no lo hizo de frente, acusándolo de facha, ¿hay algo más facha que golpear a alguien a traición? El domingo ya veremos quien pacta con quien para que nos gobierne los próximos cuatro años, miedito me dan.

Para finalizar os dejo una frase de alguien que sabe más que yo   “La política es el arte de servirse de los hombres haciéndoles creer que se les sirve a ellos”. Louis Dumur